Índice
- ¿De qué se trata?
- ¿Cómo funciona?
- Beneficios
- Tipos de tratamiento
- ¿Cómo saber si es usted candidato?
- ¿Qué esperar durante la intervención?
- Resultados
- Preguntas más frecuentes
¿De qué se trata?
Una sauna de infrarrojos es diferente de una sauna tradicional. En lugar de calentar todo el aire que le rodea, utiliza una luz especial que calienta su cuerpo directamente. Esto crea un calor agradable sin que el ambiente se sienta cargado o incómodo. Puede sudar y liberar toxinas con menos esfuerzo, por lo que es ideal incluso para quienes no toleran bien el calor intenso.
¿Cómo funciona?
La luz infrarroja penetra profundamente en la piel y los tejidos blandos, elevando gradualmente la temperatura interna del cuerpo. Esto activa las glándulas sudoríparas, provocando una intensa transpiración que ayuda a eliminar toxinas a través de la piel. El calor también mejora la circulación sanguínea, alivia los dolores musculares y articulares y estimula la producción de proteínas de choque térmico, que protegen las células y contribuyen al bienestar general.
Beneficios
- Desintoxicación mediante sudoración intensa.
- Alivio del dolor y recuperación muscular tras el ejercicio o una lesión.
- Mejora la circulación y la salud cardiovascular.
- Efectos antienvejecimiento, como la mejora de la firmeza y textura de la piel y la reducción de la inflamación.
- Relajación y bienestar emocional gracias a la liberación de endorfinas y una sensación de calma.
Tipos de tratamiento
Las saunas de infrarrojos suelen ofrecerse en sesiones individuales que duran entre 15 y 30 minutos o más, en función de la tolerancia y los objetivos personales.
¿Cómo saber si es usted candidato?
Este tratamiento es ideal para quienes buscan mejorar el bienestar general, aliviar la tensión muscular, favorecer la sudoración o mejorar la salud de la piel sin una exposición intensa al calor.
¿Qué esperar durante la intervención?
El calor es suave y profundo, similar a la luz del sol por la mañana. La temperatura aumenta lentamente, permitiendo que su cuerpo empiece a sudar de forma natural sin molestias. Empezará a sudar gradualmente, lo que ayudará a su cuerpo a liberar las toxinas y tensiones almacenadas. La sudoración es uno de los principales beneficios del tratamiento. Durante la sesión, puede relajarse, escuchar música, meditar o simplemente descansar. Es un momento ideal para desconectar del estrés diario. La hidratación antes y después de la sesión es esencial, ya que el cuerpo pierde líquidos a través de la sudoración.
Resultados
Después de una sesión, la piel suele tener un aspecto más radiante, el cuerpo se siente más ligero, se alivian los dolores musculares y mejora la circulación. Muchos usuarios manifiestan una profunda sensación de relajación y una mayor flexibilidad.
